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12 Consejos Útiles para Estudiar la Biblia

mujer leyendo con taza en mano

Mis primeros intentos de estudiar la biblia no fueron muy éxitos. En realidad, mis primeros intentos de leerla tampoco lo fueron.

Recuerdo estar sentada en la sala de la casa de mi abuela, y tomar un libro ancho del estante, tenía entre 7 a 9 años.

En varias visitas lo abrí y comencé a leer, no se parecía en nada a otros libros que hubiera leído antes. Tenía muchos números y la historia no me hacía ningún sentido.

Recuerdo que en letras grandes decía: GÉNESIS y no pasé de esa primera página. Luego de varios intentos me di por vencida.

Desde que comencé a asistir a la iglesia, he pasado muchas horas leyendo la Biblia sin entenderla o sin saber que hacer con lo que he estado leyendo.

Luego de más de 20 años en este proceso de estudiar la Biblia, me siento mucho más preparada para estudiarla y enseñarla.

Quizás estés igual de pérdida como yo lo he estado antes y te estés haciendo alguna de estas preguntas:

Te compartiré 12 consejos que te serán de gran utilidad, ya sea que estés comenzando a estudiar la Biblia o necesites entenderla mejor. Como veremos más adelante, estudiar la Biblia impacta cada área de nuestra vida y es importante que lo hagamos correctamente.

¿A qué nos referimos con estudiar la Biblia?

Soy amante de la lectura y podemos leer por muchas razones, por entretenimiento, para aprender, etc. Cuando hablamos de estudiar la Biblia, nos referimos a más que simplemente leerla.

Nos referimos a hacer una lectura intencional con el propósito de conocer a Dios, entender lo que leemos en su contexto para entonces poder aplicarlo a nuestra realidad hoy.

Estudiar la Biblia es un proceso y una disciplina,

será más fácil y lo haremos mejor mientras más lo practiquemos.

¿Por qué es importante estudiar la Biblia?

Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra. 2 Timoteo 3:16-17

La Biblia es la palabra de Dios, y esta es suficiente para conocerlo. Es por medio de la Biblia que conocemos a Cristo y su obra redentora por nosotras. Ella tiene la autoridad de transformarnos, mientras la leemos seremos confrontadas con nuestro pecado. Además, veremos que mientras más la estudiamos encontraremos el balance que tanto anhelamos en nuestras vidas.

¿Hay diferencia entre el estudio bíblico y el tiempo devocional?

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¿Cómo empezar a leer la Biblia?

Al principio no tendrás todas las respuestas a tus preguntas, será un proceso difícil; para que puedas avanzar en el proceso, utiliza los consejos a continuación.

Primero, si eres parte de una iglesia local, comienza por aquellos libros que estén enseñando en tu iglesia; si aún no tienes una iglesia local, comienza tu búsqueda.

Segundo, habla con una hermana a quien le puedas rendir cuentas de tu progreso. A ella le podrás hacer preguntas de las dudas que te surjan, le podrás pedir sugerencias sobre que libro estudiar y compartir con ella lo que estás aprendiendo. Pídele que esté orando por ti mientras te ejercitas en esta disciplina.

Además, puedes seguir un plan de lectura como una guía para progresar en tu lectura bíblica.

¿Qué necesitas para estudiar la Biblia?

Te recomendamos tener estas herramientas disponibles:

Puedes utilizar el Diccionario de la Real Academia Española en línea.

Te compartimos una libreta de notas gratuita

12 Consejos Útiles Para Estudiar la Biblia

Haz un plan de estudio

Como guía puedes seleccionar un plan, un reto de lectura, o una guía como la que compartimos de Colosenses.

Pero más que buscar un plan ideal, necesitas tomar tres decisiones: que libro de la biblia vas a estudiar, en que horario lo vas a hacer y en que lugar vas a realizar tu estudio.

Estas decisiones van a variar de acuerdo a la temporada en la que te encuentres, lo más importante es que seas realista en tus planes.

Prepara un plan que puedas cumplir, lo menos que queremos es comenzar un plan que no podamos seguir y que nos lleve al desánimo.

Sé consistente

Esto va de la mano con el plan de estudio que establezcas, ya sea que decidas hacer tu estudio dos días a la semana o todos los días. Lo crucial es que seas consistente.

Piensa además en cuánto tiempo vas a dedicar a tu estudio. Crea recordatorios o alarmas para ayudarte, separa el tiempo en tu agenda como si tuvieras que asistir al trabajo o a una cita importante.

Ora: antes, durante y después de tu tiempo de estudio

Antes de comenzar tu estudio para que el Señor te dé sabiduría y hambre por su Palabra.

Durante el tiempo de estudio, cuando te sientas confrontada, haz una oración de arrepentimiento. ¿Te sorprendió algo del carácter de Dios? Levanta una oración de adoración.

Cuando cierres tu tiempo de estudio, pídele al Señor que su palabra pase de ser conocimiento a transformar tu corazón. Lee más sobre como Jesús nos enseñó a orar.

Utiliza un método de estudiar la biblia

Ya mencionamos que no solamente queremos leer la Biblia, sino que queremos ser intencionales en conocer a Dios y entender lo que leemos en su contexto. Para lograr esto necesitamos seguir un método de estudio para que no caigamos en el error de darle nuestro propio significado a la Biblia. Te recomendamos tratar alguno de los siguientes:

Haz anotaciones

Mientras vas contestando las preguntas en el método que selecciones, haz anotaciones en tu libreta de notas, así podrás hacer referencia a las mismas en otra ocasión.

También puedes tomar notas en el margen de la Biblia o marcar algunos versículos. Para mí lo más importante es que las notas sean legibles para poder utilizarlas en otra ocasión.

En mi caso me gusta tomar notas digitales en este Diario de la Biblia, pero como hemos mencionado antes, usa lo que tengas disponible al momento.

Considera el contexto

Si aún no has escogido un método que seguir, procura, aun así, considerar el contexto de lo que estás estudiando. Contesta las siguientes preguntas sobre el libro o porción que estés estudiando:

Busca definiciones

Ya mencionamos que necesitas acceso a un diccionario, es fundamental que aclaremos el significado de palabras que no usamos frecuentemente para que podamos entender mejor lo que leemos.

Tener la definición correcta de las palabras es de gran importancia para entender el mensaje original del texto. Es un consejo sencillo, pero no lo pases por alto.

Referencias cruzadas y concordancias

Casi todas las biblias tienen de una forma u otra notas o referencias. Luego de realizar los consejos anteriores, mira estas referencias.

Te podrán ayudar a entender historias pasadas, conocer más de los personajes y a ver otros pasajes sobre el mismo tema.

No te aconsejo que lo hagas al principio de tu estudio, para que te des la oportunidad de contestar las preguntas en los métodos por ti misma. Luego, utiliza las notas y referencias para confirmar o ampliar lo que dice el texto principal.

Identifica la gran historia

La biblia consiste en 66 libros que parecieran ser 66 historias diferentes, pero estas son en realidad partes de una gran historia: la historia de la redención.

La historia se divide en cuatro partes: Creación, Caída, Redención y Restauración. Te invito a leer más sobre El Gran Panorama de la Biblia.

Sé paciente

Te tomará tiempo desarrollar la disciplina de estudiar la biblia y debes ser paciente. En ocasiones no tendrás los ánimos de hacerlo o los días serán complicados para cumplir tu plan de estudio.

Ajusta el plan de ser necesario, y regresa a ser consistente. Quizás pienses o sientas que, aun así, no entiendes lo que lees. Es ahí que buscarás la ayuda de una hermana madura o tu pastor. Poco a poco notarás como mientras aplicas estos consejos y métodos será más fácil.

Medita en la Palabra

En el estudio somos intencionales a no simplemente leer, sino entender lo que leemos. Al meditar en la Palabra pasamos de aprender datos y hechos a aplicarla a nuestra vida diaria.

Oramos que la palabra pase a nuestro corazón, somos honestas cuando la palabra nos confronta y oramos para que el Señor nos transforme. Revisa tus notas, lee los pasajes en varias ocasiones y mantén la Palabra en tu mente aún fuera de tu tiempo de estudio.

Memoriza Versículos

No podemos estar leyendo la Biblia en todo momento, por lo que necesitamos memorizarla. Mientras lo hacemos seguiremos meditando, nos alentará en momentos difíciles recordar la verdad de Dios y nos ayudará a compartir el evangelio con otros.

Además, nos recordará que vivimos todos los días delante del Señor. Si necesitas fortalecer esta área de la memorización de la palabra, te comparto 7 ayudas para memorizar la Biblia.

Recursos Recomendados

Preguntas Frecuentes

Sí, en el Salmo 1:2 nos dice: Si no que en la ley del Señor está su deleite, y en Su ley medita de día y de noche. Aunque debes separar momentos específicos para estudiar la biblia, debes leer la biblia a diario.

Puedes empezar por el principio y leerla en orden, si estás leyendo o estudiando la Biblia por primera vez, te recomiendo que leas aquel libro del cual se está predicando en tu iglesia local o uno de los evangelios.

Conclusión

Estudiar la Biblia no es una actividad opcional para los cristianos, es una necesidad. Debe formar parte de nuestra vida diaria. Habrá días en los que será más fácil que en otros. Aun así, debemos ser consistentes y crecer en esta disciplina.

Así como un atleta entrena y se ejercita para ser mejor cada día en su deporte, nosotras debemos ejercitarnos en estudiar la biblia para cada día “manejar con precisión la palabra de Verdad.” 2 Timoteo 2:15

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